Hace solo unos días, en la noche de gala celebrada en Turín (Italia), se dio a conocer toda la lista de The World’s 50 Best Restaurants 2025. En 2025 la comunidad hispanohablante ha logrado un hito histórico: seis de los diez primeros restaurantes pertenecen a cocinas de habla hispana. Una señal inequívoca de la fuerza y la creatividad que emanan de España y América Latina. ¿Cómo se explica este auge hispanohablante? Uno de los factores clave es la tradición reimaginada. Cada caso muestra cómo la identidad local, desde la cocina nikkei limeña hasta las brasas vascas, la milpa mexicana o el asado argentino, puede transformarse en un discurso culinario global e innovador.
Tanto pioneros consolidados como nuevas voces impulsan una narrativa fresca, diversa y potente. Otro elemento fundamental es la sostenibilidad y el impulso regional: la granja propia de Don Julio, la pesca responsable de Etxebarri o la cocina de proximidad de Quintonil subrayan un compromiso con lo ético y lo local, valores esenciales en la gastronomía contemporánea.
Además, cada destino, Lima, Ciudad de México, Madrid, Buenos Aires, se posiciona como epicentro de experiencias culinarias, atrayendo visitantes con historias que trascienden el plato. Los premios regionales (como Latin America’s 50 Best o Michelin) y la creciente visibilidad mediática han contribuido a fortalecer las marcas detrás de estos restaurantes, consolidando su presencia en el escenario mundial.
Maido (Lima, Perú) – N.º 1

Este templo de la cocina nikkei, fundado en 2009 por Mitsuharu “Micha” Tsumura, combina con maestría la tradición peruana con técnicas japonesas. Su menú degustación, que oscila entre 288 y 586 €, es un viaje de precisión, equilibrio y elegancia. Maido ha sido una presencia constante en la lista, y en 2025 alcanza la cima como el mejor restaurante del mundo. Cada plato es un diálogo armónico entre producto local y delicadeza oriental.
Asador Etxebarri (Atxondo, España) – N.º 2

Dirigido por Bittor Arguinzoniz, este asador vasco utiliza exclusivamente brasas y maderas seleccionadas, encina, sarmiento, vid, para realzar ingredientes locales como la chuleta de vaca Rubia Gallega, percebes o cigalas. Su cocina, austera en apariencia pero técnicamente impecable, celebra la pureza del producto con un menú que ronda los 280 €. Una experiencia de fuego, respeto y territorio.
Quintonil (Ciudad de México, México) – N.º 3

Codirigido por Jorge Vallejo y Alejandra Flores, Quintonil es un referente de la nueva cocina mexicana. Fusiona ingredientes tradicionales, milpa, chiles, insectos, con técnicas contemporáneas y una sensibilidad estética notable. Ofrece tanto menú degustación como opciones a la carta, y su propuesta, que incluye platos como huauzontles y mole madre, celebra lo local sin perder sofisticación. En 2024 fue galardonado con dos estrellas Michelin.
DiverXO (Madrid, España) – N.º 4

El universo provocador de Dabiz Muñoz sigue desafiando las convenciones. Instalado en el NH Eurobuilding y con tres estrellas Michelin, DiverXO propone una experiencia sensorial extrema, con menús que superan los 900 €. Inspirado en mundos posnacionales, punk, mohicano, onírico, cada servicio se convierte en un relato culinario vibrante, teatral y arriesgado. La presión es alta, pero la creatividad no tiene límites.
Kjolle (Lima, Perú) – N.º 9

El proyecto personal de Pía León, una de las chefs más influyentes de América Latina, representa una mirada femenina, joven y profundamente conectada con el territorio. Kjolle ofrece menús entre 185 y 240 €, donde ingredientes poco explorados de la Amazonía, los Andes o la costa peruana se presentan con delicadeza y carácter. Su ascenso refleja el reconocimiento a una cocina sensible, contemporánea y audaz.
Don Julio (Buenos Aires, Argentina) – N.º 10

El fundador de Don Julio Pablo Rivero. Photo Credits: Martin Bonetto
La emblemática parrilla fundada por Pablo Rivero en 1999 se ha transformado en símbolo del asado argentino elevado a categoría mundial. Guiado por el chef Guido Tassi, Don Julio ofrece una experiencia honesta y precisa: carnes de Aberdeen Angus y Hereford de su propia granja, una bodega de más de 14 000 etiquetas nacionales y platos como mollejas, empanadas o bife de chorizo, servidos en un ambiente de cálida hospitalidad. Calificado como el mejor restaurante de América Latina en 2024, demuestra que la tradición, cuando se ejecuta con excelencia, también puede brillar en el fine dining.
La presencia de seis restaurantes hispanohablantes entre los diez mejores del mundo no es un fenómeno casual, la lista de los 100 mejores restaurantes incluye muchos otros lugares de España y América Latina; se trata, por tanto, de una ola cultural poderosa. Estas cocinas demuestran que lo local tiene voz global, y que la fusión entre raíces, creatividad y responsabilidad social puede generar propuestas que rivalizan con cualquier otra tradición culinaria del mundo. Es la prueba de que el futuro del fine dining no está reservado únicamente a grandes metrópolis europeas: viene de Lima, Bilbao, Ciudad de México, Madrid, Buenos Aires… y habla español. El camino continúa, pero hoy la gastronomía hispanohablante ya tiene su lugar, firme y merecido, en el podio mundial.